¿Cómo lograste hacerme dudar?
¿Cómo lograste entrar en un corazón cerrado y lleno de él?
¿Cómo hiciste que vuelva a soñar?
¿Cómo lograste que vuelva a sonreír?
¿Cómo hiciste para abrirme los ojos y mostrarme que él no es el mundo?
¿Cómo lograste hacerme entender que no tengo por qué morir por él?
“(…)
¿Cómo hago para seguir?
cuando todo está tan mal,
de dónde saco las fuerzas
cuando sólo quiero no despertar.
(…)
Sola en la oscuridad de mi habitación
inundándola con mi llanto
con mis alas rotas
en el suelo, sólo llorando.
(…)”
Tu luz me inunda y me colma, él es un ser de la noche, un ángel de alas negras, vos sos un caballero de luz.
Pero aún amo a ese ángel oscuro, aún mi alma late a su ritmo, aún es el aire que respiro y la fuerza de mi sangre, aún doy todo por él, aún muero por él…
Ojalá puedas salvarme, necesito que me salves…